Con reacciones positivas, la comunidad mundial recibió el acuerdo entre Washington y Pekín, para la reducción temporal por tres meses de los aranceles comerciales.
Tras dos días de conversaciones en Ginebra, el representante de comercio de Estados Unidos indicó que la Casa Blanca, acordó bajar su tasa arancelaria del 145% sobre los productos chinos, en 115 puntos porcentuales llevándola al 30%.
Mientras que China, acordó bajar su impuesto sobre los productos estadounidenses de forma similar al 10%.
La medida entrará en vigencia antes del 14 de mayo. Donald Trump, al inicio de su mandato adoptó una ofensiva arancelaria justificada como una forma de contrarrestar prácticas que considera "injustas" y defender empleos en Estados Unidos.
Por su parte, el ministerio de Comercio de China comentó que la reducción de estos gravamenes se enmarca en el interés común del mundo.