Este sábado, el Gobierno de Estados Unidos anunció la movilización de unos 2.000 efectivos de la Guardia Nacional en la ciudad de Los Ángeles para contener las protestas iniciadas este viernes. Los manifestantes se congregaron en el centro de la ciudad para exigir la liberación de 44 extranjeros detenidos al ser considerados inmigrantes indocumentados por agentes del Servicio de Inmigración.
Donald Trump autorizó la movilización de efectivos tras justificar que ni el gobernador de California, Gavin Newson, ni la alcaldesa de la ciudad, Karen Bass, tuvieron la capacidad de frenar las protestas que, según el mandatario, derivaron en una situación de “anarquía”.
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“Si el gobernador Gavin Newsom, de California, y la alcaldesa Karen Bass, de Los Ángeles, no pueden hacer su trabajo, algo que todos saben que no pueden, entonces el Gobierno Federal intervendrá y resolverá el problema de los disturbios y saqueos, ¡como debe ser!”, sostuvo Trump en un mensaje en Truth Social.
El presidente republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, añadió que Newsom "ha demostrado incapacidad o falta de voluntad, lo que motivó la intervención del presidente". Además, respaldó la posibilidad de recurrir a los marines en servicio activo en caso de que la situación se agrave.
La medida, como era de esperar, generó críticas, principalmente por parte del gobernador del estado demócrata. "La movida del presidente Trump (...) es un alarmante abuso de poder", dijo en un comunicado. "Es importante que respetemos la autoridad ejecutiva de los gobernadores de nuestro país para manejar su Guardia Nacional", agregó.
También se pronunció la presidente de México, Claudia Sheinbaum, al confirmarse que de la totalidad de los detenidos 35 eran ciudadanos mexicanos. "Los mexicanos que viven en Estados Unidos son hombres y mujeres de bien, son hombres honestos que se fueron a Estados Unidos a buscar una mejor vida (...) ¡No son criminales!", expreso.
Enfrentamientos del domingo
El operativo comenzó este domingo, cuando unos 300 soldados de la Guardia Nacional llegaron a Los Ángeles por órdenes del presidente Donald Trump. Mientras el mandatario deja abierta la posibilidad de desplegar tropas militares en otras ciudades, prometió que las tropas asegurarán “una muy severa legalidad y orden” en Los Ángeles.
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Las tropas de la Guardia Nacional son una fuerza militar de reserva en situaciones como desastres naturales pero rara vez en disturbios civiles. Se encargan de "llevar a cabo la protección y seguridad de instalaciones y personal federal", según el comando militar.
Sin embargo, los oficiales de la institución están “específicamente entrenados para este tipo de situaciones multitudinarias”, declaró la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem.
En el enfrentamiento, agentes federales y soldados militares dispararon granadas aturdidoras y gases lacrimógenos contra los manifestantes que se oponen a la detención de decenas de migrantes en la ciudad de Los Ángeles y Nueva York.
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