ECONOMIA
Incertidumbre

Deuda en pesos: vencen $30 billones en los próximos dos meses y crece la inquietud entre los analistas

El Gobierno no pudo renovar el 100% de los vencimientos en abril y debió pagar $3,5 billones en efectivo a los tenedores de instrumentos en moneda nacional. Las perspectivas para mayo y junio y las incógnitas en torno al financiamiento del Banco Central al Tesoro.

Luis Caputo
Luis Caputo | NA

Tras el envío de los recursos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial por US$ 13.500 millones que engrosaron las reservas internacionales, los reflectores se posicionan sobre la deuda en pesos. El Tesoro no logró renovar el 100% de los vencimientos en abril y vencen casi $30 billones en mayo y junio, lo que genera inquietud entre los analistas sobre la capacidad de refinanciamiento de los pasivos.

A lo largo del mes corriente, el equipo económico enfrentó dos licitaciones de pasivos en moneda nacional. En la primera consiguieron renovar el 75,5% de los instrumentos que vencían mientras que en la segunda, el porcentaje se redujo a 70%. Según cálculos de avezados observadores del mercado, la dinámica reinyectó unos $3,5 billones en el mercado.

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Deuda en pesos y financiación del BCRA al Tesoro

En simultáneo, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) anunció que obtuvo una ganancia contable de $19,4 billones en 2024, de los cuales giró $11,7 billones al Tesoro. El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, informó que este monto puede ser utilizado de forma eventual para cancelar deuda en pesos que no logren renovar en las licitaciones mensuales.

Bajo la perspectiva del Gobierno, la imposibilidad para refinanciar el 100% de la deuda no responde a un apetito dolarizador sino a una demanda genuina de pesos de los acreedores para redirigir los recursos hacia créditos y otras inversiones de la economía real.

Al mismo tiempo, consideran que con los fondos transferidos del Central al Tesoro generarán un mayor colchón de liquidez que permitiría un menor roll over, tasas más agresivas o la compra dólares para cumplir con vencimientos en moneda extranjera.

Sin embargo, analistas y consultoras advierten que el uso de los pesos girados del BCRA al Tesoro para pagar deuda podrían tener un impacto monetario considerable ya que, en práctica, implicaría un financiamiento directo, una mecánica que la istración libertaria buscó erradicar desde el desembarco de Javier Milei en la Casa Rosada.

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Deuda en pesos: vencen casi $30 billones entre mayo y junio

El director de la consultora Outlier, Gabriel Caamaño, explicó que "si esos pesos que son una transferencia de una utilidad devengada quedan en el balance del BCRA, cualquiera sea la operación (cancelarle LECAPS o bonos en poder del BCRA) no hubo emisión exógena".

"Si esos pesos salen de ahí para cubrir falta de roll over en una licitación, entonces tendremos la vuelta de la emisión exógena para asistir financieramente al Tesoro. Luego tendremos la discusión si dicha emisión está o no convalidado por un aumento de la demanda de pesos", juzgó.

A su turno, el analista financiero Christian Buteler planteó que el Tesoro "se comió el colchón de pesos que recibió del BCRA cuando se trasladaron los pasivos remunerados, y esto sucedió a pesar del superávit primario y las colocaciones netas del Tesoro en el mercado local".

El Gobierno llegó a tener $16 billones depositados en su cuenta en el Banco Central. Con el correr de los meses, utilizó parte esos recursos para comprar dólares a fin de cancelar deuda en moneda extranjera y, a la vez, hacer frente a vencimientos en pesos que quedaba fuera de los refinanciamientos mensuales.

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En la actualidad, los depósitos públicos ascienden a $1,7 billones, tras el desembolso $2,2 billones en la última licitación de la semana pasada. A esta cifra hay que sumarle los $11,7 billones que proveyó la autoridad monetaria. Por lo tanto, el número final casi toca los $14 billones.

"Mientras tanto la demanda de pesos fue incrementándose, en parte por condiciones favorables como mayor demanda de crédito, menor inflación pero también una mayor nominalidad en los precios, llegando al famoso 'punto Anker' donde el sistema le pide los pesos al Tesoro (menor roll over)", describió Buteler.

Y agregó: "Un mercado con falta de pesos no solo incentiva la venta de dólares sino también la cancelación de deuda o la suba de tasas en caso de necesitar o querer sostener el nivel de deuda. El giro de utilidades del BCRA al Tesoro para pagar vencimientos de deuda que no puede renovar llega justo cuando los depósitos del Tesoro comienzan a agotarse".

Un informe de Cohen Aliados Financieros remarca que a medida que el Tesoro se sirva de los pesos entregados por parte de la autoridad monetaria para la cancelación de deuda en pesos, "se generará un efecto expansivo". "Aunque este uso sería eventual, le quita presión al Tesoro en las licitaciones, que vienen mostrando un roll over inferior al 100%", añade.

Vencimientos de deuda en pesos

Desde LCG manifestaron que la refinanciación parcial de los vencimientos "implica una inyección de pesos en la economía y quedará ver si ese excedente se destina a bienes, dólar, o es convalidado por un aumento de la demanda de dinero y resta presión sobre la tasa de interés".

Por otra parte, un reporte de GMA Capital sostuvo que "en las últimas subastas vimos cómo el mercado se posicionaba muy corto en la curva, con emisiones que no superaban los 3 meses y con elevadas tasas de corte". En ese contexto, se produjo una acumulación de vencimientos desafiantes que afrontará el Tesoro en mayo y junio: $16,1 billones y $13,7 billones, respectivamente.

"Sin embargo, en otros aspectos, la historia parece haber cambiado. El Tesoro logró estirar el plazo de colocación a 6 meses, y el nivel de tasas ya se encuentra cercano a principios de marzo, con una Lecap a 90 días operando en 2,5/2,6% mensual. Al igual que al comienzo de la Fase 2, mayores certezas en el horizonte incrementan la demanda de instrumentos en pesos", pondera como factor positivo.

No obstante, los consultores plantearon que más allá de que la remonetización es necesaria para sostener el incremento en la actividad (crecimiento interanual de 5,7% en febrero), "las tasas en pesos deben permanecer atractivas para fomentar las posiciones en moneda local".

MFN / ds