Rodrigo Fernández, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Córdoba, fue tajante al analizar la situación del transporte urbano y el futuro de las empresas que reemplazaron a Ersa. “FAM y SiBus continúan con el permiso precario que se otorgó oportunamente”, y adelantó que antes de fin de mes se definirá si siguen operando.
A casi tres meses del arribo del Grupo FAM y con más de un mes desde el desembarco de SiBus, el funcionario diferenció el desempeño de ambas prestatarias: “SiBus funciona muy bien y como lo habíamos planeado. FAM ha mejorado, había hecho un plan oportunamente, pero no lo cumplió en una primera etapa”.
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El contraste entre ambas gestiones es notorio. SiBus arrancó con una flota de 170 colectivos, en su mayoría provenientes de Tamse pero con unidades propias en óptimas condiciones. Según Pablo Farías, secretario general de UTA, “viene funcionando al 100%”.
Qué pasa con el Grupo FAM
FAM, por su parte, prometió una renovación que no se materializó en tiempo y forma. De los 298 colectivos prometidos de los cuales la serían mitad nuevos, no hay información oficial sobre cuántos se incorporaron efectivamente. Aunque mejoró sus frecuencias, el servicio aún no alcanza los estándares exigidos: “Todavía no está al nivel de lo que ellos ofrecieron y de lo que nosotros necesitamos para la gente”, remarcó Fernández.
La implementación de la Tarjeta Sube, con más de 60 mil unidades entregadas, será clave en el análisis final que se hará a fin de mes. “Vamos a evaluar cómo continúan ambas empresas”, señaló el funcionario.
El futuro de FAM, según parece, pende de un hilo.