El presidente ad honorem del recientemente disuelto Instituto Nacional Belgraniano, Manuel Belgrano, chozno (hijo de tataranietos) del creador de la Bandera y uno de los “padres de la Patria”, cree que el cierre de la institución ordenada por el Gobierno nacional no tiene motivos “lógicos ni comprensibles” y que atenta contra una entidad que desde hace 80 años investiga, preserva, publica documentos de valor histórico y cultural y difunde el legado de uno de los próceres indiscutidos de la Argentina.
Como descendiente directo del general Belgrano, Manuel le dijo a Perfil Córdoba que siente indignación, repudio y tristeza por lo acontecido. La noticia sobre la disolución de éste y otros institutos como el Browniano y el Newberiano o la reducción a museo del Sanmartiniano se conoció la Semana de Mayo, cuando fue anunciada en el Boletín Oficial del gobierno de Javier Milei.
El Instituto Belgraniano tiene un archivo extraordinario, una biblioteca de tres mil libros, cuadros y otros bienes patrimoniales que conserva desde hace décadas. A eso se suma el trabajo que realizaban en escuelas y en la organización de actos patrios.
La noticia causó malestar en varios sectores y hay un petitorio en Change.org para juntar firmas en contra del cierre. Ya ha recogido la adhesión de 4.200 personas, entre ellas historiadores, reconocidos divulgadores e investigadores. La medida se enmarca en los recortes en las áreas de Cultura y Educación.
De esta manera, los ocho institutos de investigación histórica que dependían del Estado pasarían ahora a formar un único organismo nacional en el que se estudiaría a “los próceres” (como expresó en su anuncio el vocero presidencial Manuel Adorni): el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas. Esa entidad estaría a cargo de funcionarios designados por el Gobierno.
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El Instituto Belgraniano funcionaba en el Regimiento de Infantería 1 de Patricios, por lo que no tiene gastos de funcionamiento ni de alquiler y cuenta con cuatro empleados: tres monotributistas y un investigador que lleva 20 años recuperando documentos fundamentales. El gran acervo documental del general Manuel Belgrano está en el Archivo General de la Nación y en el Archivo del Museo Mitre.
-¿Por qué cree que ordenaron el cierre del Instituto Nacional Belgraniano junto a otras instituciones de gran valor cultural y patrimonial?
-No hay motivos lógicos ni comprensibles para encontrar justificación ante una medida atentatoria contra instituciones que se dedican desde hace muchas décadas a una labor cultural y de investigación histórica con criterio profesional y que se centran en el estudio de las personalidades que forjaron los cimientos de nuestro país desde su etapa fundacional. Sobre todo, es inexplicable este decreto disolutorio en el caso de Manuel Belgrano, un hombre que no adhirió a partidos ni facciones. Considerado por todos los argentinos como un indiscutible “padre de la Patria”, Belgrano fue pionero y precursor de todas nuestras transformaciones culturales, políticas, económicas y sociales en la etapa más temprana de construcción nacional.
-¿Es un ataque a la historia en común, al legado de los héroes de la patria?
-Sin duda que el ataque es contra la historia, como forjadora de nuestra identidad y reservorio de la memoria de los argentinos
-¿Es una falta de interés en nuestros grandes hombres, es ignorancia, un desprecio a la preservación de la memoria, es un mensaje o es un poco de todo?
-Un poco de todo lo mencionado, pero sobre todo creo que responde a una absoluta falta de sentimiento patrio de los ejecutores de la medida.
-Como descendiente directo del general Manuel Belgrano, ¿qué siente ante esta decisión?
-Indignación, repudio y tristeza.
-El Gobierno dijo que todos los Institutos y Academias van a converger en una misma área y los funcionarios serán designados por el Gobierno ¿qué opina?
-El decreto 346/2025 disuelve, entre otros institutos nacionales de investigación histórica, al Instituto Nacional Belgraniano, pero no precisa cuál será ese futuro ente aglutinador.
-Es un riesgo para nuestro acervo y legado modificar la autarquía e independencia de esta institución? ¿Está en riesgo nuestra identidad nacional?
-Sí, absolutamente. Este tipo de funcionamiento garantizaba el federalismo y la pluralidad de los eventos y actividades institucionales, así como la variedad y cantidad de estudios historiográficos publicados por los Institutos. Igualmente, eso importaba la custodia del acervo patrimonial para las generaciones actuales y venideras. Todo ello sin desmedro del signo político de los gobiernos de turno a lo largo de la historia. El Instituto Nacional Belgraniano estaba próximo a cumplir 81 años ininterrumpidos de existencia al servicio de la comunidad
-¿Le parece una provocación que se haya publicado en el Boletin Oficial días antes del 25 de mayo?
-Considerando otras medidas gubernamentales similares, es al menos sugestiva, pues para el caso de Belgrano, hablamos del númen de mayo, aquel que impulsó justamente aquellos hechos emancipatorios de la corona española y que derivaron en la independencia de la patria.
-Se están juntando firmas para impedir el cierre, ¿qué otras acciones van a llevar adelante?
-El propósito siguiente es conformar una asociación civil con los mismos objetivos y funciones que continúe el legado belgraniano y siga siendo custodia de su memoria y acciones.
