No hay justificación para mantener el abandono, yuyales, falta de iluminación y despojos en un depósito judicial donde se deben custodiar bienes secuestrados. Este es el eje de un juicio que comienza este jueves en la Cámara 10° del Crimen de Córdoba, integrada por jurados populares.
Es el primero, pero habrá más por la cantidad de expedientes similares bajo investigación en la Fiscalía Penal Económica y Anticorrupción a cargo de Matías Bornancini.
El acusado en este caso es el comisario Juan Eduardo Frasinelli (46) quien fue responsable del Depósito Judicial 2 en Potrero del Estado Bouwer entre marzo del 2019 y marzo del 2020.
Allí son trasladadas las motos secuestradas en diferentes procedimientos. Son bienes cuya custodia la Justicia encarga a la Policía de Córdoba.
Por años desaparecieron motos, autos, motopartes y autopartes de esos espacios, al punto de llegarse a hablar de una mafia que aprovechaba el estado de abandono de esas dependencias policiales para extraer esos elementos. El problema es que, con el tiempo, fueron apareciendo los dueños que iban a retirar sus pertenencias devueltas por la Justicia y se encontraron con la penosa noticia de que ya no estaban ahí, no existían.
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El juicio que comienza hoy analizará la falta de control atribuida a Frasinelli sobre el depósito a su cargo, que permitió que personas no identificadas sustrajeran 24 motos y motopartes que habían ingresado para su resguardo.
Como jefe debió controlar. Era responsable directo de verificar las motocicletas que ingresan, con la papelería correspondiente como así también la salida de los vehículos, los oficios y retiros, las guardias del personal, los servicios y la seguridad del predio, gestionando todo lo relacionado a la logística, como disponibilidad de handys, iluminación, indumentaria.
El fiscal instructor, Matías Bornancini advirtió al requerir el juicio que existía un estado de limitaciones evidentes en esas instituciones policiales provinciales, tanto presupuestarias, de personal e insumos. Pero le reprochó a Frasinelli que, en ese caso, debió requerir e implementar otras estrategias de protección de los bienes. “El imputado Juan Eduardo Frasinelli no puede (como de la fuerza de seguridad) desconocer esta realidad”, afirmó el fiscal.
Una pésima sorpresa
Esta causa comenzó cuando un particular denunció la desaparición de su moto Honda del depósito de Potrero del Estado. Había sido secuestrada el día 7 de abril del 2020. En septiembre le notificaron la devolución pero cuando fue al Depósito N° 2 se enteró que su moto había desaparecido. Fue la noticia que permitió luego descubrir que hasta ese momento se había producido la sistemática desaparición de motos secuestradas.
Por esa razón se lo acusa a Frasinelli, defendido por el abogado Germán Gianotti, como responsable de la custodia del lugar, entre el año 2019 y el 2020. Una de las víctimas es asistida por los abogados Rodrigo López Tais y Dania Villanueva.