Las acciones argentinas que cotizan en Wall Street siguieron la tendencia alcista global, con incrementos de hasta un 3%. El impulso fue principalmente debido a la difusión de los datos de empleo en Estados Unidos para abril, que superaron las expectativas del mercado.
Los índices norteamericanos registraron ganancias importantes, liderados por el Dow Jones de Industriales, que subió un 1,4%, alcanzando los 41.317 puntos. Este aumento se produjo tras conocerse que el desempleo se mantuvo estable en un 4,2%, y que la economía estadounidense creó 177.000 nuevos empleos, superando las proyecciones de los analistas.
El S&P 500 también experimentó un incremento del 1,5%, cerrando su novena jornada consecutiva de ganancias, la más larga desde 2004. El índice logró recuperar todas las pérdidas sufridas durante la guerra comercial por aranceles, y superó su nivel de cierre del 2 de abril, justo antes de que el presidente Donald Trump anunciara nuevas medidas arancelarias contra China.
Rendimiento de las acciones argentinas y el impacto del petróleo
El desempeño de las acciones argentinas en Wall Street fue positivo, con Ternium (+3,4%) y Tenaris (+3%) a la cabeza. Este comportamiento se destacó debido al desacoplamiento que experimentaron las acciones argentinas de la tendencia global, un fenómeno que había sido notable en la semana anterior. Sin embargo, la caída del 1,2% en los precios del petróleo impactó negativamente en las acciones de las energéticas locales, con Vista Energy (-1,4%) y YPF (-0,7%) registrando descensos.
En el ámbito corporativo, los resultados del primer trimestre de Apple no cumplieron con las expectativas del mercado, lo que provocó una caída del 3,7% en sus acciones. Por otro lado, Amazon tuvo una leve caída de 0,1%, a pesar de los resultados positivos en la mayoría de las acciones del Dow Jones. Nvidia (+2,6%), Microsoft (+2,4%) y Caterpillar (+3,1%) fueron las compañías que destacaron en el lado positivo de la bolsa.
A pesar de las variaciones en los precios de las acciones, los bonos argentinos se mantuvieron estables en Nueva York. De acuerdo con el economista Gustavo Ber, los títulos de deuda del país podrían experimentar una significativa mejora si se reduce el riesgo país, lo que se traduciría en un importante potencial de crecimiento para los inversores, especialmente en los bonos más largos.
La guerra comercial y las tensiones con China
Uno de los factores que impulsó el optimismo en los mercados fue la posible desescalada en la guerra comercial entre Estados Unidos y China. A finales de la semana, China expresó su disposición a negociar los aranceles, lo que generó expectativas de que las conversaciones formales pudieran comenzar pronto. Sin embargo, Pekín dejó claro que las negociaciones solo avanzarían si Estados Unidos mostraba su sinceridad y eliminaba los aranceles unilaterales.
Por su parte, el presidente Trump defendió las tarifas del 145% impuestas a las importaciones chinas, argumentando que eran necesarias para proteger los intereses de Estados Unidos. Sin embargo, su postura fue contrastada por los esfuerzos internos de la istración para suavizar las tarifas gradualmente y retomar las conversaciones con China.
En este contexto, la posibilidad de un acuerdo comercial entre ambas potencias continuó alimentando las esperanzas de una recuperación sostenida en los mercados internacionales. Mientras tanto, las tensiones comerciales seguían siendo un factor importante a observar, ya que cualquier avance en las negociaciones podría tener repercusiones significativas en las bolsas globales.