Tras la media sanción al proyecto de recomposición jubilatoria, el diputado radical Fernando Carbajal habló con Canal E y salió al cruce del discurso oficial que amenaza con vetarlo.
Un impacto fiscal mínimo
El diputado nacional defendió la media sanción de la ley que incrementa el bono jubilatorio y actualiza haberes mínimos: “Eso representa, según los cálculos técnicos, un 0,4% del PBI”. Además, afirmó que “es una medida fiscal muy prudente” y desmintió que comprometa las cuentas públicas como denuncia el Gobierno.
Sobre el incremento del bono de 70.000 a 110.000 pesos, Carbajal aclaró: “Es un mecanismo que no nos gusta, pero frente a la decisión del Gobierno de mantenerlo, lo único que estamos haciendo es actualizarlo a valores constantes frente a la inflación”. Remarcó que, pese a los anuncios oficiales, “seguimos teniendo índices de inflación elevados que carcomen el nivel de ingresos”.
Recuperar lo perdido con prudencia
Respecto al haber previsional, Carbajal explicó que el objetivo es “permitirle al jubilado recuperar ese 7% que el Gobierno retrajo en enero de 2024”, en referencia a la inflación de ese mes. Aseguró que no se trata de un aumento indiscriminado, sino de una “medida extremadamente prudente y razonable”.
Criticó la postura del Ejecutivo al señalar que “hay un encaprichamiento en no querer reconocer que los haberes están quedándose atrás respecto a la inflación”.
La amenaza de veto y la reacción opositora
Frente a la amenaza de veto presidencial, Carbajal fue claro: “Vamos a insistir con el mecanismo constitucional de los dos tercios, aunque no tengamos la certeza de conseguirlos”. En ese caso, advirtió que el Gobierno deberá asumir el costo político de no asistir a los jubilados.
“Si no, que digan cuál es la recomposición que ofrecen”, desafió. Según el diputado, el argumento del déficit “no es real” y se utiliza con fines selectivos: “Cuando el Gobierno quiere y tiene prioridades políticas, encuentra el modo de conseguir financiamiento”.
Doble vara en el uso de fondos
Carbajal criticó la inconsistencia del discurso fiscalista del oficialismo. “Este es un Gobierno que no tiene problema en aumentarle 250% los fondos a la SIDE”, ejemplificó, en contraste con la negativa a mejorar las jubilaciones mínimas.
El proyecto, según afirmó, “indica claramente fuentes de financiamiento posibles”, lo que derriba el argumento de un impacto fiscal inasumible.
Un paliativo necesario
Consultado sobre si el aumento realmente mejora la situación de los jubilados, Carbajal fue autocrítico, pero firme: “Es solo un paliativo, pero necesario”. Si bien reconoció que el incremento no compensa todo lo perdido, enfatizó que “no tiene gran incidencia en el déficit”.
El radicalismo se mostró dispuesto a insistir con el proyecto, pese al veto presidencial, para dejar expuesta la falta de alternativas ofrecidas por el Gobierno: “Cuando se trata de dar respuesta a sectores que lo necesitan, ahí recién se acuerdan del déficit cero”.