En diálogo con Canal E, el economista, Eduardo Coria Lahoz, se refirió a la coyuntura industrial argentina y advirtió sobre los riesgos que implica la apertura de importaciones para la producción nacional. Aunque reconoció que la economía muestra una recuperación sostenida, alertó: “El Gobierno camina una delgada línea entre bajar la inflación y destruir empleo”.
“La economía efectivamente se viene recuperando”, afirmó Eduardo Coria Lahoz y destacó que, “la industria acumula cuatro meses consecutivos de crecimiento en la producción, según la UIA”. Sin embargo, matizó: “Cuando uno entra a la parte micro, el crecimiento es bastante heterogéneo. Hay sectores beneficiados y otros muy rezagados”.
Entre los más afectados, mencionó a la construcción y al sector automotriz, que siguen registrando una caída interanual de casi el 4%. “Los sectores que están creciendo son los que tuvieron un muy mal comienzo de 2024, entonces la comparación mejora sus números”, explicó.
Mejoras en el salario: una de las claves de la recuperación económica
Uno de los factores clave en esta recuperación, según Lahoz, es la mejora del salario real. “El poder de compra de los salarios viene mejorando tanto en pesos como en dólares”, aseguró. Y agregó: “Hoy el salario promedio en dólares ya se acerca a los niveles de diciembre de 2001, cuando salimos de la convertibilidad. En ese momento era de unos 1.050 dólares, y ahora ya estamos arriba de los 1.000”.
No obstante, advirtió sobre los costos crecientes para las empresas exportadoras. “Hasta el año pasado, las empresas exportadoras tenían ventajas. Hoy, con los salarios en dólares en alza y los precios internacionales estancados o a la baja, esas ventajas se están revirtiendo”, explicó.
El impacto de las importaciones sobre el empleo
El caso de Vaca Muerta es ilustrativo. “El precio del petróleo está en su nivel más bajo en los últimos 14 o 16 meses, lo que afecta las proyecciones de generación de divisas del sector energético”, señaló el economista.
En cuanto al impacto de las importaciones en el empleo, comentó: “Estamos perdiendo competitividad. Si nos abren la economía y permiten la importación de maquinaria usada, como exige Estados Unidos, las empresas locales van a competir en condiciones muy desiguales”.