“Con humildad tengo que pensar que quienes votaron por Milei saben algo que yo no sé. Siguiendo la idea hegeliana de que existe la astucia de la historia, de que todo es por algo, incluso que los momentos equivocados son para aprender o cambiar, pienso que la Argentina va a ser mucho mejor en 2030”, analizó el periodista y cofundador de Editorial PERFIL, Jorge Fontevecchia, en la mesa de “QR”. Luego completó: “No me gustaría que el presidente fuese Milei, pero creo que la gente común tiene una cuota de sabiduría" que explica que "hacía falta una persona así".
El periodista se refirió al reciente fallecimiento del papa Francisco y puso en perspectiva su legado en términos geopolíticos. “Tengo enorme expectativa —optimista— de que la doctrina del papa termine generando el comienzo de un nuevo ciclo hacia posiciones de centro o de centro izquierda”, pensó, refiriéndose luego a que, desde su óptica, Donald Trump es una “hipérbole del expresidente estadounidense Ronald Reagan”, exageración extrema propia de una época política que estaría por dar paso a otro momento histórico diferente y más cercano al pensamiento del extinto pontífice.
“Conversábamos en el pase con Marcelo Longobardi, en Radio Perfil, respecto de si los papas son hijos de su tiempo o de uno por venir”, expresó, y observó en Francisco a un emergente de una época situada “15 años atrás” caracterizada por un "socialismo bolivariano y un progresismo silvestre y autoritario —donde incluyo al kirchnerismo—", afirmó. También subrayó que los papas "construyen una narrativa que se convierte en políticas décadas después".
Al conceptualizar al pontífice fue directo: “Francisco fue mucho más que un papa. Fue un líder moral y político a la vez, como Mahatma Gandhi”.
Consultado en la mesa sobre su postura respecto de la relación entre los discursos de odio y la violencia material, coincidió en la existencia de una íntima relación entre una y otra, y dijo que no le llamó la atención la agresión que sufrió el periodista Roberto Navarro, con quien tiene una distancia crítica. Fontevecchia hizo hincapié en que la violencia discursiva de toda autoridad tiene un “poder performativo”, esto es, que el acto mismo de habla produce un efecto concreto y material al momento de ser pronunciado, apuntando a la responsabilidad que debe interpelar a los mandatarios en orden de ser conscientes de dicho poder para que no se vuelva en contra de la sociedad.
Promediando la charla en el programa que se emite por la pantalla de Bravo TV de lunes a viernes a las 22, el cofundador de Editorial PERFIL hizo una larga reflexión sobre el rol de los medios de comunicación en la actual revolución mediática del presente, iniciada, desde su óptica, con el advenimiento del smartphone en 2007. Fue en relación con los ataques del presidente Milei a los periodistas donde marcó un punto con detenimiento. Dijo que el presidente suele criticar a los medios y periodistas que tienen llegada a la clase social y educativa más alta, y que el Ejecutivo encuentra allí una preocupación electoral.
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Luego coincidió con la posición en torno de los impuestos que la conductora Mirtha Legrand defendió en su clásica mesa de invitados. Hacia el cierre, recordó que el próximo sábado 3 de mayo se celebrará el Día Mundial de la Libertad de Prensa, proclamado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1993.
Citando al historiador y escritor israelí Yuval Noaḥ Harari, Fontevecchia dijo en relación con el periodismo que “No hay actividad que si no se autorregula no pierda prestigio”, poniendo el acento en la necesidad de señalar la mala praxis periodística allí donde aconteciese. “Frente a la violencia discursiva, desde ya es necesario hacer buen periodismo, pero es insuficiente”, expresó hacia el final, apuntando a que toda calumnia debe ser denunciada ante la Justicia. “A las palabras las tomo con valor, el mismo valor que tienen”, concluyó.
FPT