CÓRDOBA EN OFF

Siciliano todoterreno en la Unicameral: sonidista y encargado del switcher 4g3h2w

La discusión por el Apross tuvo un fuerte condimento extra en la última sesión: la protesta con quite de colaboración de los Legislativos. El presidente del bloque oficialista, a full. 2t121q

Miguel Sicliano, en la Foto: CEDOC PERFIL

La última sesión en la Unicameral no fue una más, como ya nos tienen acostumbrado los legisladores ante el áspero choque de fuerzas entre los halcones cambiemistas y las espadas del PJ. Pero, la discusión por la “crisis del Apross” tuvo un fuerte condimento extra: la protesta con quite de colaboración de los Legislativos.

Pese al pedido de algunos opositores de postergarlo, el plenario se desarrolló en medio de una ruidosa manifestación de los trabajadores legislativos. Casi no hubo sonido (se escuchaba poco, por no decir nada), ni trasmisión en vivo. Tampoco hubo registro de los taquígrafos ante la medida de fuerza del Sindicato de Empleados Legislativos (SELC).

La cúpula de poder del PJ en la Unicameral no dejó margen para que el gremio le tuerza el brazo y se suspendiera la acalorada sesión. El hiperactivo Miguel Siciliano metió mano en el sonido y el switcher de control para poner en marcha el plenario, aunque la discusión fue “un diálogo de sordos” ante los bombos que retumbaban en el ingreso del recinto, que fue bloqueado con unos paraguas con el logo del SELC.

Como si algo faltara, en el tramo final de la votación de la batería de 20 proyectos de la oposición sobre el Apross, la oficialista Cristina Pereyra debió ser asistida por una descompensación. Tras un cuarto intermedio, con especulaciones de todo tipo por si volvía o no, Pereyra retornó a la banca y se puso fin a la votación. Luego se retiró. El PJ zafó sin que le sobrara nada en su rechazo. Fue gracias al voto doble del presidente provisorio, Facundo Torres, que permitió desempatar a su favor.

Los funcionarios y el miedo a Milei i5m1f

La crisis que atraviesa la Fábrica Argentina de Aviones (Fadea) parece no tener fin. Aunque la semana pasada los directivos solucionaron la deuda que mantenían con los empleados, quienes caminan la histórica fábrica aseguran que “con un poco de gestión” y “sin ocultar los problemas”, la realidad sería muy distinta.

En el primer caso, se refieren a que los directivos principales de la empresa no están en Córdoba, lo que hace difícil la gestión del día a día. “No se puede manejar la fábrica a control remoto”, sostienen las fuentes consultadas.

El otro tema, va un poco más allá. Algunos le apuntan al ministro de Defensa, Luis Petri, ya que aseguran que “conoce a fondo cuál es la verdadera situación de la fábrica”, pero existen dudas si esa realidad le fue trasladada al presidente Milei.

“Da la sensación de que algunos funcionarios le tienen miedo a Milei y no le cuentan la película completa”, añadió la fuente. “Eso está más que claro porque el gobierno no privatiza las empresas (no lo hizo con ninguna de las que figuran en la Ley Bases) pero tampoco gestionan”, señalan. ¿Estará al tanto Milei de la situación de Fadea?

El “Índice Llaryora”, un abuso 5d5i2w

El legislador radical Miguel Nicolás disparó munición pesada al apuntar al corazón mismo del poder llaryorista. El opositor calificó de “abusivo” al “Índice Llaryora” que también se aplicó en la tarifa del servicio que presta Aguas Cordobesas.

El experimentado parlamentario puso el acento en el “también”, cuando en su crítica aludió al “impuestazo” y al “tarifazo” de EPEC. “El agua en Córdoba tuvo un incremento del 132% de abril del 2024 a abril del 2025, mientras que en el mismo período la inflación fue del 54,3%”, puntualizó.

“Llaryora maneja las tarifas más caras del país, de manera exagerada, subiendo los impuestos y los servicios, duplicando y en algunos casos triplicando los índices de inflación, de manera de darle a su gobierno y a la Empresa Aguas Cordobesas un colchón financiero para sus gastos, los cuales nunca ajustaron”, se quejó el radical a través de las redes sociales. En su embate, el opositor le reclamó a Llaryora “basta de aumentos”. “Los cordobeses no soportamos más la presión fiscal sobre los magros ingresos de las familias cordobesas”, afirmó el integrante de la bancada UCR en la Unicameral.